¿Qué pasa si tienes un accidente y el contrario no tiene seguro?
El seguro obligatorio de vehículos a motor es la mejor garantía de que tanto las víctimas del accidente de tráfico puedan ser indemnizadas como que el conductor responsable no vea seriamente dañado su patrimonio. Lamentablemente, según la DGT, unos dos millones y medio de vehículos circulan sin seguro en España. Casi el 8 %. Así que la pregunta ¿qué pasa si tienes un accidente y el contrario no tiene seguro? no es inusual.
Lo primero que tenemos que diferenciar son la distinta situación de cada persona en función de si es ocupante o conductor y, en este caso, si tiene la culpa o no.
Accidentes en los que el conductor del vehículo no asegurado no tiene la culpa
La culpa es lo que determina el derecho a percibir una indemnización. Un conductor puede contar con carnet y seguro en vigor, pero si por una imprudencia o despiste provoca un accidente con otro vehículo cuyo conductor circule sin seguro o ni siquiera carnet deberá abonar una indemnización por los daños causados.
Por supuesto, será la compañía de seguros quien lo abone.
En este caso, el conductor del vehículo no asegurado, al no ser responsable del accidente, tendrá derecho a cobrar una indemnización. Tanto él, como el resto de ocupantes del vehículo no asegurado.
Accidentes en los que el conductor del vehículo no asegurado tiene la culpa
En este caso, las víctimas del accidente, tanto los ocupantes del propio vehículo como los ocupantes del otro vehículo tendrán derecho a ser indemnizados.
Para asegurar que dichas personas puedan percibir esa indemnización existe el Consorcio de Compensación de Seguros, que es el organismo que paga a los lesionados en el accidente de tráfico en los que el responsable no tiene seguro.
Y no solo la indemnización.
La asistencia sanitaria por lesiones en un accidente de tráfico debe ser abonada por las compañías de seguros. Esto implica que los costes de la asistencia que reciban también deberán ser asumidos por el Consorcio de Compensación de Seguros.
Es importante destacar que este organismo, para el cálculo de la indemnización, se basará en el mismo baremo que cualquier aseguradora privada. Por tanto, no es cierta esa leyenda urbana de que si el contrario no tiene seguro contratado se cobra menos.
¿Cómo se reclama la indemnización por accidente de tráfico provocado por un vehículo sin seguro?
Ya hemos dicho que el responsable de indemnizar es el Consorcio de Compensación de Seguros, pero antes de iniciar nuestra reclamación debemos tener en cuenta lo siguiente:
1. Asegurarnos de que el vehículo no está asegurado.
Aunque parezca mentira, hay casos en los que el conductor del vehículo responsable no sabe con qué compañía tiene contratado el seguro o bien nos aporta un seguro que ya no está vigente.
Nos referimos a situaciones como los coches de empresa, de alquiler, coches que se dejan a un amigo… La casuística es más grande de lo que pensamos. Para poder tener constancia de si existe o no seguro deberemos solicitar la correspondiente certificación al FIVA (Fichero Informativo de Vehículos Asegurados). Es un Fichero que gestiona el Consorcio de Compensación de Seguros y cuyo contenido nos dirá si ese vehículo estaba asegurado o no en el momento del accidente.
2. Acreditar la existencia del accidente.
Para reclamar no bastará con decir que hemos tenido un accidente con tal vehículo y que el mismo no estaba asegurado. Deberemos probarlo con el Parte Amistoso o con el Atestado policial.
3. Acreditar que hemos sufrido lesiones y los daños causados a nuestro vehículo
Será fundamental aportar los informes médicos del tratamiento que hayamos recibido por nuestras lesiones para demostrar tanto los días de baja como las secuelas que nos hayan quedado.
En cuanto al vehículo deberemos aportar el peritaje de daños que haya realizado nuestra aseguradora y la factura de reparación. En estos casos, el Consorcio no deja compromisos de pago al taller, sino que abona según peritaje aportado y la factura que se le presente conforme esa reparación se ha llevado a cabo.
4. Elaborar un escrito de reclamación previa y presentarlo en la sede del Consorcio de tu lugar de residencia.
Junto a toda esa documentación, deberás preparar una reclamación en la que consten tus datos, las circunstancias del accidente, los vehículos y personas implicadas y los documentos que aportes.
Todo ello lo deberás presentar al Consorcio de Compensación de Seguros de la provincia donde residas.
¿Qué pasa si no estoy de acuerdo con la indemnización que me oferta el Consorcio de Compensación de Seguros?
Como con cualquier otra compañía de seguros, si tras la reclamación previa no se logra alcanzar acuerdo de manera amistosa, podremos demandar al Consorcio ante la jurisdicción civil en la sede de la capital de provincia donde se haya producido el accidente.
Esto sería todo lo que tienes que tener en cuenta como víctima de un accidente de tráfico en el que el responsable circule sin seguro. Pero antes de terminar queremos comentaros un supuesto especial.
¿Qué sucede soy ocupante del vehículo no asegurado y culpable del accidente y el conductor es un familiar o amigo?
Este es un supuesto especialmente peliagudo. Imaginad que circulamos con nuestro padre, madre, hermano y por un despiste se sale de la vía y en el accidente sufrimos lesiones. En este caso la reclamación sigue los cauces que hemos comentado, pero luego viene la segunda parte.
Cuando el Consorcio de Compensación de Seguros paga las correspondientes indemnizaciones luego se las reclamara tanto al conductor como al propietario del vehículo si fueran distintas personas. Esto quiere decir, por ejemplo, que si es nuestra pareja el Consorcio nos abonará la indemnización, pero luego se la reclamará a tu pareja. En estas situaciones tendrás que asesorarte a fin de tomar la mejor decisión.
Si has sufrido un accidente en el que el responsable no esté asegurado en nuestro bufete nos encargamos de todo lo que necesitas para reclamar una indemnización por tus lesiones y daños sin que tengas que incurrir en gastos o provisiones de fondos. Llámanos y estaremos encantados de informarte y sin compromiso.